¡España dejará de ser una isla energética!

La Comisión Europea ha designado como "corredor prioritario" la interconexión eléctrica y de gas entre España y Francia, una decisión que permitirá la cofinanciación con fondos europeos de proyectos energéticos en la región a partir de 2012.

"La Península Ibérica hasta el momento ha estado un poco aislada", reconoció en rueda de prensa el comisario europeo de Energía, Gunther Oettinger, quien aseguró que el objetivo a partir de ahora será lograr que la producción energética española, en especial solar y eólica, y de otros países como Marruecos, pueda ser transportada hasta Europa central.

Para Oettinger, "la integración de las redes energéticas es importantísima", por lo que el principal reto sería lograr que haya "una línea que vaya más allá de los Pirineos". La CE reconoce que se trata de un proceso difícil, pero propone que se establezcan comunicaciones, no por tierra, sino a través del Mediterráneo e incluso del Atlántico.

Interconexiones

En concreto, Bruselas considera que la interconexión entre España y Francia debería ampliarse desde los 1.400 megavatios actuales hasta los 4.000 MW en 2020. En total, la CE señaló cuatro corredores prioritarios para el sector eléctrico y tres para el gas.

Además de las interconexiones del suroeste de Europa con el resto de la UE, entre las que figura el paso entre España y Francia, Bruselas quiere impulsar una línea que permita traer la energía eólica producida en alta mar en el norte de Europa a los estados miembros centrales; reforzar las conexiones en los países del centro-este y sureste a través de redes regionales y potenciar la integración en el mercado energético del Báltico en el europeo.

El Ejecutivo comunitario identifica también como prioritario el "corredor sur" con el que prevé traer gas desde el Caspio a Europa y diversificar el suministro.

También resulta fundamental para Bruselas desde el punto de vista gasístico consolidar la integración del mercado energético del Báltico y fijar una vía norte-sur con la que poder eliminar los cuellos de botella internos que existen en la actualidad.

Inversión

La Comisión calcula que se necesitarán alrededor de 200.000 millones de euros de inversión para reforzar las infraestructuras eléctricas y de gas hasta 2020.La mitad de esa cantidad la generará el propio mercado, pero los 100.000 millones restantes precisarán apoyo público y privado.

La CE dar un primer paso en este sentido el próximo junio, cuando propondrá un nuevo instrumento financiero para apoyar proyectos de infraestructuras energéticas de interés europeo con vistas a las nuevas perspectivas financieras a partir de 2013.

Fuente: El Mundo