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8 de septiembre de 2012

Marruecos quiere ser referente africano en renovables

Marruecos quiere ser un referente en energía renovable, no tanto por vocación, si no por obligacion. Su factura energética no deja de aumentar, y su demanda está desbocada. Desde hace pocos años Marruecos ha decidido apostar fuerte por las renovables (aprendiendo de los errores de sus vecinos españoles) e impulsa una ambiciosa agenda en la que quiere instalar 2000MW en energía eólica y solar en los próximos años. Y se ha puesto manos a la obra, ha licitado (y a punto de adjudicar) su plataforma solar del sur junto a Ouarzazzate, así como un ambicioso proyecto eólico de nada menos que de 1000MW. Un gran mercado que atrae a empresas del todo el mundo.


¿Y como se financia todo eso? Pues parece que los inversores privados e institucionales creen en Marruecos. El Banco Africano de Desarrollo (BAD) acaba de anunciar un préstamo de US $ 800 millones (más de 7 mil millones de dirhams) para el plan ONE y solar desarrollado por Masen. Un presupuesto que permitirá a Marruecos completar la financiación del programa de electrificación rural (PERG) la gran plataforma de energía solar. En total 1,5 GW. 
Marruecos se constituye así en líder africano en renovables. Su estrategia nacional tiene como objetivo aumentar el porcentaje de energías renovables en la generación de electricidad a 42% en 2020. Ya en mayo pasado el BAD había aprobado un préstamo de 168 millones de euros (más de 1.850 millones de DH) procedentes de sus recursos propios, así como un préstamo concesional de 100 millones de dólares (878 millones de dirhams) del Fondo para una Tecnología Limpia (CTF). Un préstamo para financiar la primera fase de la Ouarzazate central, la mayor planta termosolar del mundo.

Un proyecto diseñado sobre la base de la colaboración público-privada (Masen y un operador privado) que una vez en funcionamiento suministrará electricidad no sólo en Marruecos sino también en los países del Mediterráneo y de Europa. Un mega proyecto que cuenta con apoyos en el Banco Asiático de Desarrollo, el Banco Mundial, el Banco Europeo de Inversiones, la Agencia Francesa de Desarrollo, el Banco Alemán de Desarrollo (Kf W) Fondo de Inversión de Vecindad (FIV-UE),etc 

Marruecos es el banco de pruebas y la puerta de África. Posicionarse allí supone tener un aventaja competitiva importante para atacar el resto del continente.

4 de julio de 2012

Alemania quiere ser el rey de las renovables en Marruecos


Alemania hace tiempo que tiene la mirada puesta en Marruecos en materia de energía, y ha trabajado con tesón para conseguir ser un socio estratégico. Fruto de eso trabajo, Berlín y Rabat firmaron hoy una declaración de intenciones que busca aunar el potencial marroquí en materia de energías solar y eólica y la experiencia industrial alemana en este campo. 
El acuerdo, rubricado en Berlín, se centra en el desarrollo de una asociación bilateral para la extensión de las energías renovables y enfatiza la necesidad de respaldar políticamente la iniciativa Desertec, un proyecto alemán para crear una central solar gigante en el Sahara.
Un acuerdo que aporta a ambos países "significativas ventajas", aseguró el ministro alemán de Economía, Philipp Rösler, tras firmar el documento común con el ministro marroquí de Energía, Minería, Agua y Medio Ambiente, Fouad Douiri. 
Desertec, que aspira a importar del Sahara alrededor de un 20% de las necesidades energéticas en Europa para 2020, comenzará en breve la construcción en Marruecos de su primera fase: las primeras centrales eólicas y solares, con una potencia conjunta de 250 megavatios, cuya entrada en funcionamiento está prevista para 2014.
La iniciativa Desertec cuenta con la participación de importantes consorcios energéticos y entidades bancarias de toda Europa, aunque principalmente alemanes, entre las que se encuentra también Abengoa Solar. 

18 de mayo de 2011

Alemania busca sus fuentes de energía al norte y al sur.

De todos es sabido que Alemania tiene una alianza estratégica con Rusia para satisfacer sus necesidades energéticas. Rusia provee de gas a la locomotora europea, aumentando no solo sus ingresos, sino convirtiéndose de nuevo en un actor geopolítico central en el tablero de la lucha por los recursos energéticos. En los últimos años, esa relación se ha profundizado de forma importante, hasta el punto de que los intereses de Alemania y Rusia colisionan o no coinciden necesariamente con los intereses generales europeos. 

Pero Alemania no mira solo hacia el norte, está apostando de forma muy importante por acceder a nuevas fuentes de suministro en otras regiones, y en particular por aquellas que pueden proveer energías limpias y potenciar así su maquinaria industrial y tecnológica. Y eso se llama eminentemente energía solar. 

Estos días el ministro alemán de Asuntos Exteriores Guido Westerwelle en Marruecos un país importante pero no capital para Alemania. Tras visitar Marrakech y rendir homenaje a las víctimas del atentado del café Argana, el ministro alemán fue recibido hoy por el rey Mohamed VI, algo que solo se reserva a los amigos de Marruecos o a socios de especial interés. Y es que esta visita oficial de tres días está centrada centrada en reforzar la cooperación bilateral en energías renovables.

Los Alemanes hace años que trabajan ya en reforzar su asociación en el terreno de las energías renovables con los países del sur del Mediterráneo a través del faraónico proyecto Desertec. Una iniciativa desarrollada por un grupo de empresas y bancos alemanes, al que se han sumado otras firmas europeas, también españolas, para crear en los países del norte de África una cadena de centrales de energía solar y eólica que cubriría el 15 por ciento de las necesidades energéticas europeas en un plazo de 40 años.

Desertec es un proyecto ambicioso pero está respaldado por empresas como Siemens y Deutsche Bank están apoyando la construcción de una cadena de plantas de energía solar en el Norte de África, a tan gran escala que podría suministrar electricidad a hogares e industrias europeas para el final de la próxima década. La infraestructura costará al menos 400 billones de euros. Desertec podría cubrir al menos 15% de las necesidades energéticas europeas para 2019. Para 2050, estiman que esta contribución podría ser de entre 20% y 25%.

Las empresas españolas nos tenemos que poner las pilas. Los éxitos del pasado no garantizan los éxitos del futuro, y los demás caminan deprisa.