5 de diciembre de 2015

Cumbre de París y el futuro de la energía: más inversión en renovables y eficiencia.

En la Cumbre del Clima de París todos lo tienen claro. Para reducir las emisiones de CO2 y conseguir que la temperatura media del planeta a final del siglo XXI no suba más de dos grados respecto a los niveles preindustriales, el futuro de la energía pasa por duplicar la presencia de las energías renovables en el sistema energético mundial y seguir aumentando la eficiencia energética en lo spróximos 15 años.

Así pues la batalla es inmediata, no podemos esperar y necesitaríamos paa ello doblar la inversión global en energías limpias hasta llegar a los 500.000 millones de dólares anuales en 2020. Una cifra que parece desorbitante, pero perfectamente alcanzable su utilizamos solamente una parte de las subvenciones a los combustibles fósiles, que sin mayores que las ayudas e incentivos a las energías limpias, como bien muestra el informe anual de la Agencia Internacional de la Energía.


En la última década ha habido avances importantes. Entre 2004 y 2014, se multiplicaron por seis y el récord de inversión se alcanzó en 2011, con 279.000 millones de dólares, aunque la crisis financiera desaceleró la tendencia, y son ya los países en desarrollo los que invierten más en renovables que los países desarrollados, y las previsiones sonq que en África las renovables se van a multiplicar por cuatro en los próximos 15 años y por tres en Latinoamérica. 

Y si existe la voluntad política y se eliminen los obstáculos normativos y exista seguridad jurídica de las inversiones, es más que posible alcanzarlo. Según el balance presentado en la cumbre de París, más de 500 instituciones financieras y fondos de inversión están dispuestos a invertir en energía limpia. Estos inversores poseen 3,4 billones de dólares en activos que movilizados en la buena direción pueden constituir un círculo vortuoso de desarrollo sostenible con la creación de millones de puestos de trabajo; green jobs.

Así pues invertir en un futuro basado en sistemas de energía limpios no solo tiene sentido desde el punto medioambiental o social, sino económico. Tenemos la oportunidad de conciliar necesidad y oportunidad en un win-win para todos (o casi todos). El reto es ver si los Gobiernos son caapaces de comprometerse con el futuro y no solo ser prisioneros del presente.



5 de noviembre de 2015

Argentina: nueva ley de Energías Renovables

Argentina implementa una nueva Ley de Energías Renovables que propone un salto en el uso de fuentes limpias de ocho por ciento en 2017 a 20 por ciento en 2025 a escala nacional. Aprobada con gran mayoría del Congreso, la iniciativa establece para incentivar proyectos nuevos beneficios fiscales, acceso a créditos especiales tanto de la banca pública como privada, y crea el Fondo de Energía Renovable (Foder)

Ese es un fondo fiduciario destinado a respaldar el financiamiento de proyectos de inversión. El Foder se financiará con el 50 por ciento del ahorro en combustibles líquidos logrado con la generación de energías limpias. Argentina, que era autosustentable en energía antes de la irracional privatización de las empresas nacionales durante el neoliberalismo que se estableció en 1990, pasó a ser un importador de combustibles.

La ley obliga a los grandes consumidores a abastecerse con energías renovables y penaliza el incumplimiento. En todo caso, por energías renovables se entiende con esta nueva norma la eólica, la mareomotriz, la fotovoltaica, la generada por los residuos sólidos urbanos y el biodiésel.

El país cuenta con escasos parques de energía eólica, aun cuando la región patagónica y también la costera presentan condiciones inmejorables para su desarrollo. En el mismo sentido es mínimo el uso de los paneles de energía solar, considerando que las provincias recostadas sobre la Cordillera de los Andes llegan a tener 300 días de plena luz solar al año. La provincia de San Luis, en el centro oeste del país, es la que más desarrollo presenta, incluyendo edificios públicos que se alimentan solo de paneles solares.

Recientemente, un equipo del Instituto para la Producción Popular presentó un proyecto llave en mano para la colocación de paneles solares en las terrazas de edificios de hasta 12 pisos, lo que permitiría el bombeo de agua a los tanques sin depender de la costosa red de energía.

Fuente: REVE

8 de agosto de 2015

Clamor contra el "impuesto al sol", oligopolios frente a ciudadanos

No hay institución imparcial o seria que apoye la decisión del Gobierno español de imponer un impuesto al sol para las instalaciones de autoconsumo con renovables de pequeña potencia. La Comisión Nnacional de la Competencia y ahora el Defensor del Pueblo instan al Gobierno a resconsiderar su postura, más bien fundada en el apoyo al oligopolio eléctrico que al interés general.


El autoconsumo con renovables y al ahorro y la eficiencia energética son los nuevos paradigmas del futuro de la energía, y en España algunos insisten en vivir en el siglo XX más que en el siglo XXI. Los principales países socios y vecinos de España apuestan por las renovables, implicando a los ciudadanos a través de la promoción de las pequeñas instalaciones de autoconsumo y la generación distribuida en el territorio. Obama acaba de mover ficha igualmente apostando por unanueva política energética, en el que las renovables de pequeña potencia y el autoconsumo se encuentran en el centro de la nueva estrategia.

En España el clamor contra la cacicada del Gobierno va en aumento. El Defensor del Pueblo considera que este impuesto solo tendría sentido en caso de que la instalación vertiera el excedente a la red, pero cuando un consumidor produce energía con el único propósito de autoconsumirla "no se le deben exigir unos requisitos que en la práctica lo equiparen a un productor", señala la recomendación.

El texto, que recuerda los informes sobre autoconsumo de la Comisión Nacional de la Energía y de Competencia en 2013, compara el empleo de energía solar para el autoconsumo con que un consumidor encienda la chimenea para producir calor —y no usa gas ni electricidad, sino recursos naturales—: "Quienes emplean una chimenea no pagan un impuesto por ello, ni se les exige darse de alta en ningún registro público", señala. 

Se puede decir más alto pero no más claro. Algunos insisten en vivir en el pasado frente a las tecnologías y modelos energéticos sostenibles del futuro.

30 de junio de 2015

Un nuevo paradigma energético mundial, autoconsumo con renovables

Pese a la oposición de algunos gobernantes y empresas con intereses en las industrias con modelos de negocio del siglo XX, la transición energética es inevitable. Una nueva forma de producir y consumir energía está llegando de forma irreversible e inevitable en el que las energías renovables serán las protagonistas, especialmente la de de pequeña y mediana potencia con la energía solar a la cabeza.

Solo es cuestión de tiempo y se le ponen trabas y se retrasa por intereses económicos de algunos pocos, lo que conllevará que se retrase la creación de miles de empleos verdes y se limite la competitividad de muchas pymes. Además, tendrá un efecto negativo en la lucha contra el cambio climático ya que hará que no lleguemos a tiempo a evitar que la temperatura del planeta aumente por encima de los 2 grados, 

Hoy ya no defendemos eso unos cuantos militantes, sino las grandes agencias económicas del planeta. La revolución de las renovables está aquí y el cambio será descentralizado y a nivel del consumidor como defiende el informe Bloomberg New Energy Outlook 2015, que predice cómo cambiarán las tendencias de demanda y producción energéticas en los próximos 25 años con una conclusión bien clara: el autoconsumo será clave para el cambio de modelo.

La democratización de la energía está cada día más cerca. Os invitamos a leer un poco sobre ello en estos enlaces de gran interés:


17 de febrero de 2015

Smart Cities, ¿una nueva burbuja?

Los Alcaldes de las grandes y medianas ciudades se han lanzado a la loca carrera de las ciudades inteligentes. Emergen como setas, y es sin duda necesario, pero ¿es smart todo lo que reluce?, en muchos casos es más un movimiento de márketing político que una apuesta real. Para convertir una ciudad en smart hace falta visión, planificación, inversiones.....y ciudadanos y dirigentes inteligentes. ¿Asistimos a una nieva burbuja?. ¿donde está el negocio?.

Eldiario.es ha hecho un buen reportaje al respecto. ¿Dónde está el negocio de las 'smart cities'? Presente y futuro del nuevo 'boom' español, Pues en Europa. Se acabaron los Fondos Estructurales para grandes infraestructuras, y ahora lo que luce y se financia va asociado a desarrollos tecnológicos. Europa,np quiere perder el carro de la innovación y quiere ser un continente "integrador, sostenible e inteligente", y pone a disposición los fondos FEDER y los de I+D+i (con 80.000 millones de euros, el último programa es el más ambicioso de su historia) a disposición de quienes digan que cumplen esos objetivos.

Las Smart Cities parecen ser el nuevo maná europeo. España se ha dado cuenta de que Europa tiene dinero para 'smart cities' y de que tanto empresas como administraciones pueden ir a por ello y quieren exprimirlo, y ya hay más de 60 proyectos en marcha. ¿Podemos tener tantos proyectos de calidad?

Sin duda el futuro pasa por la ciudades inteligentes, pero quizás debamos sacar lecciones de nuestro pasado reciente. No podemos tener ni una Universidad de calidad en cada ciudad ni un aeropuerto sostenible en cada Província. Pues eso mismo pasa con las smart cities, no es posible tener tantos proyectos de calidad en marcha. Son necesarias pero los costes de inversión y aprendizaje altos. Quizás deberíamos tener una docena de proyectos de referencia nacional e internacional para aprender y poder implementarlo a medio largo plazo en otras ciudades. De otro modo, quizás estemos asistiendo a la creación de una nueva burbuja.