6 de febrero de 2012

Autoconsumo energético y generación distribuida, la hora de dar un paso adelante. ¿Te sumas? #energia

El pasado 27 de enero el gobierno de España ha tiomado unas decisiones draconianas en contra de las energías renovables, eliminando de un plumazo el régimen especial, que favorecía el desarrollo de las energías limpias y la cogeneración. Una victoria del oligopolio eléctrico, ya que una buena parte de las energías renovables, por su carácter distribuido y democrático, ponían en peligro su modelo centralizado de negocio. Pero ese camino es inevitable y hace falta ahora dar un impulso al sector a través de la generación distribuida y el autoconsumo.
 
El futuro pasa así por apostar por la generación distribuida y el autoconsumo, es decir, la democratización y apropiación de la gente y del territorio de la energía como condición indispensable para desarrollar un modelo energético más coherente y transparente aprovechando el potencial de las nuevas tecnologías renovables ya disponibles en el mercado. Y ese gran salto lo representa el autoconsumo, permitiendo al usuario conectar sus equipos de generación (eólico, solar, biomasa, etc) a la red eléctrica para generar y consumir su propia electricidad y compensar saldos con la red.

Según cálculos de la Asociación de la Industria Fotovoltaica (Asif) un hogar podría consumir hasta el 80% de su propia electricidad de forma instantánea, con el consiguiente ahorro e independencia de las compañías eléctricas. El resto deberá comprárselo a la compañía eléctrica. En el caso del consumo industrial, se calcula que la capacidad de autoconsumo ascendería al 60%. Toda una revolución que además de generar un nuevo modelo podría suponer un gran ahorro y la contención de los precios, ganando así productividad y competitividad.

Es por ello que os invitamos a empujar en esa dirección y que apoyéis la campaña que se ha iniciado a través de la web Actable "A favor de la energía fotovoltaica: Implantación inmediata del balance neto", en la que se le solicita al Gobierno que desarrolle esa legislación lo antes posible. La legislación española debe permitir el despliegue de la generación distribuida y el autoconsumo con renovables ya mismo. En nuestro país, esperamos desde hace demasiado tiempo el despliegue de la normativa de conexión de aparatos de pequeña potencia. Toda una revolución en la forma de consumir electricidad en España que daría beneficios económicos, sociales y medioambientales evidentes. 




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